Los pies son la parte del cuerpo a la que muchas mujeres menos atención le ponen. Los pies soportan nuestro peso y nuestro andar por donde sea que la vida nos lleve. Muchas veces los sometemos a zapatos muy lindos y muy de moda, pero muy incómodos, o a ambientes sucios y superficies duras. Por eso, es recomendable que esporádicamente les demos un tratamiento especial.
No es necesario que consigas una cita en un salón de belleza y que te gastes una fortuna cada cierto tiempo. Una pedicure puedes hacértela tu misma en la comodidad de tu casa obteniendo los mismo resultados.Los pasos a seguir son los siguientes:
- Enjabonar. Llena la tina de tu casa o una pequeña batea con agua caliente. Agrega algunas sales de baño -si no dispones de ninguna, la sal marina actúa muy bien-, burbujas para el baño o simplemente jabón.
- Exfoliar. Cuando la piel de tus pies se ha suavizado gracias a la acción de la agua caliente, exfolia las células muertas y los callos con una piedra pomes. Tómate tu tiempo y trata de no hacerlo tan fuerte como para dañar el resto de tu piel. también puedes usar primero una crema exfoliante para pies y luego la piedra pómez.
- Cortar las uñas. Después de deshacerte de la piel muerta trabaja con las uñas. Corta tus uñas y dales la forma con una lima. No te cortes la uñas demasiado porque puedes hacer que crezcan encarnadas.
- Humectar. El siguiente paso es aplicar una crema humectante para pies, de esta forma mantendrás la piel suave.
Si lo deseas aplica el esmalte de uñas de tu preferencia:
- Utiliza unos separadores de dedos, la idea es evitar que el esmalte que ya hayas aplicado se arruine al contacto con los demás dedos.
- Para evitar que las uñas se pongan amarillas por el uso del esmalte de color, utiliza primero una base. Espera a que la base este completamente seca antes de poner el color.
- Aplica el esmalte con pinceladas suaves para evitar que se formen burbujas de aire.
- Tómate tu tiempo para que el esmalte se seque por completo.